Una complicada actuación que requirió la coordinación de distintos cuerpos de seguridad y bomberos, el desalojo de un inmueble y la detención de quien provocó los hechos que podían haber finalizado en una tragedia en San Fernando de Henares.
El pasado 29 de noviembre, en uno de los bajos del número 7 de la avenida de Madrid, se produjo una petición de auxilio, en la que los agentes de policía local y nacional que acudieron al lugar comprobaron que había un fortísimo olor a gas en la vivienda y un silbido leve que les alertó de un posible escape de gas. Se solicitó la presencia inmediata de bomberos y de forma coordinada se decidió el total desalojo preventivo del edificio y la urgente necesidad de entrar en la vivienda. Los agentes accedieron por una ventana, poniendo en riesgo su integridad física y comprobando que en el interior se encontraba un hombre en estado ebrio que habría podido abrir intencionadamente la espita de una bombona de butano, lo que podría haber provocado una tragedia, teniendo en cuenta que en la vivienda se encontraron otras cinco bombonas más de gas butano. Los agentes ventilaron y aseguraron el edificio para la vuelta de todos las/os residentes a sus domicilios. El hombre que estaba en el interior de la vivienda -presunto autor de los hechos- fue detenido e ingresó en prisión de inmediato por orden judicial, fundamentada en los reiterados quebrantamientos de orden de alejamiento sobre la mujer titular de la vivienda, y por el grave riesgo creado a vecinos, agentes policiales y bomberos intervinientes.
Los agentes y los bomberos que participaron en los hechos demostraron un alto grado de profesionalidad, coordinación entre los cuerpos policiales y los efectivos de bomberos, y la decisión mostrada en sus actuaciones permitieron una resolución satisfactoria del conflicto que puso en riesgo su propia integridad física, pero dejando a salvo a los vecinos/as del inmueble sin que se produjera ningún daño personal durante el conflicto.
Precisamente hay que destacar que el pasado 26 de noviembre, tres días antes del incidente, los Ayuntamientos de San Fernando de Henares y Coslada, a través de sus Jefaturas de Policía Local, la Comisaría del CNP de Coslada-San Fernando y el Parque de Bomberos de Coslada, celebraron una jornada de trabajo de “Coordinación Operativa Policía-Bomberos”, en la que se trataron procedimientos de coordinación entre los distintos cuerpos para intervenciones en siniestros de incendios, accidentes y otros riesgos.
